viernes, 27 de marzo de 2009

Porque soy ateo


Soy ateo porque no puedo creer en algo que jamás he visto, y de lo cual no existen pruebas de ningún tipo. Soy ateo porque no le temo a la muerte, la considero parte de la vida y la entiendo como un proceso natural e inevitable. No necesito creer en una vida después de la muerte para ser feliz y me resulta estúpida la idea de un ser superior que creó el universo cuando todas las teorías biológicas y estudios científicos indican claramente lo contrario. Soy ateo porque creo en la razón, en las potencialidades humanas y en la relación del hombre con su entorno social y natural. Las religiones, todas ellas, están basadas en culto a la muerte y a lo largo de la historia generaron odio, guerras e ignorancia. Digo deliberadamente -y que quede claro-, que el dogma de Dios apoya directamente el odio, la muerte y la ignorancia, y que han sido el principal obstáculo del progreso humano a lo largo de la historia. Las religiones enseñan que pensar es un acto peligroso y condenan la razón posicionándola por debajo de la Fe.
No es mi intención atacar al creyente como individuo pero estoy convencido de que las estructuras religiosas no han hecho absolutamente nada en pos del progreso humano, exceptuando el calendario y pocas cosas más. Lo demás ha sido construir miedo y generar odio irracional. Quiero que quede bien claro que no tengo absolutamente nada contra el creyente, respeto su libertad de culto y opinión (de hecho tengo amigos y conocidos religiosos, y son excelentes personas).
Guerras y cruzadas en nombre de un ser que jamás se manifestó de ninguna manera, privaciones por temor al fuego eterno, resignación con la esperanza de una vida en el más allá que durará por siempre y en la cual nos reencontraremos con nuestros seres queridos. Todo esto parece un gran cuento de hadas, una gran mentira que funciona como una droga para que no pensemos, no oigamos, no veamos. Sería casi gracioso si no hubiera ocasionado la muerte de millones de personas y la sumisión de la mayoría de los seres humanos a la autoridad de Dios.
Digo deliberadamente que la religión (sobre todo la cristiana) es y ha sido uno de los mayores regimenes genocidas de todos los tiempos.
Dios es omnipotente, omnipresente, todopoderoso y perfecto. Si así fuera el mundo y los seres humanos deberían ser perfectos (lógica muy básica: un ser perfecto debe engendrar algo perfecto, de lo contrario habría una debilidad en su capacidad creativa, lo que significa que no es perfecto), y bien sabemos que ha habido personajes a lo largo de la historia que están lejos de ser perfectos. Dios inmortal, hombre mortal, Dios perfecto, hombre imperfecto: ¿No suena raro? Mis instintos más básicos me dicen que el hombre creó algo que no poseyera sus defectos. Psicología de la más simple.
Soy ateo porque se que esta vida es la única y he elegido vivirla. Soy ateo porque creo en la verdad como autoridad y no en la autoridad como verdad.
En la sección “ateísmo” me voy a explayar sobre los temas mencionados superficialmente en esta entrada.

Pena de Muerte e Ignorancia


Hace aproximadamente 1 mes fue asesinado Gustavo Lanzavecchia, florista y colaborador de Susana Giménez, a raíz de lo cual la diva se declaró a favor de la pena de muerte y manifestó su desprecio por los derechos humanos hacia los asesinos y maleantes. El comentario generó polémica, controversia y despertó en la clase media - alta el usual nivel de inconsciencia y fascismo que permanece siempre allí y casualmente se activa cuando se ve amenazado su acartonamiento burgués.
Susana Giménez no representa al pueblo ni a los intereses de la sociedad, sino que habla como multimillonaria que se aterra cuando uno de los “suyos” se ve afectado. Se escandaliza cuando asesinan a una persona y jamás ha hablado acerca los miles que mueren de hambre en su país todos los días, gracias a lo cual ella monta un Mercedes Benz y va de compras a Europa mes por medio. La autoridad que representa Susana Giménez crea relativismo moral y confusión que tiene cabida gracias a la ignorancia y estupidez generalizada de la sociedad. Primero, dudo seriamente de que ella mantenga sus capacidades intelectuales intactas o que siquiera posea tales capacidades, por lo cual no representa una autoridad moral ni ética para opinar sobre ningún tema que se salga del teatro de revista y los romances ocultos de las participantes de concursos de baile.
Personalmente, estoy en total desacuerdo con la aplicación de la pena de muerte bajo ninguna circunstancia y/o situación ya que representa una violación directa y legal al derecho humano fundamental de la vida. La solución no es matar a quien mata, ni condenarlo al aislamiento y penurias, esto no significa ningún cambio social ya que el individuo se ve sometido a penurias, hambre, odio y denigración todos los días de su vida. La pena de muerte, la represión, la cadena perpetua no hacen más que tapar huecos cuando hay que cambiar la realidad. El sistema capitalista y personajes enriquecidos por propagar ignorancia y valores consumistas generan indefectible e inevitablemente pobreza, y la pobreza genera delito.
Lo alarmante no es el comentario de Susana Giménez en sí, sino la aceptación de tal idea por parte de la sociedad. Esto se relaciona directamente con la ignorancia de la gente que vive en una burbuja donde los programas de chimento y el fútbol ocupan el principal círculo de intereses. Por otro lado, el fascismo que caracteriza a la clase media-alta, arraigada en los valores cotidianos por influencia de las dictaduras y por la moral judeo-cristiana, que aboga por la muerte y la denigración social. No es mi interés profundizar sobre la cuestión religiosa en esta entrada., pero es necesario mencionar que la moral y los valores impuestos por la Iglesia generan este tipo de ideas nazi.
La idea básica de esta entrada es criticar a la falta de profundidad y consciencia. El crimen no se solucionará jamás con pena de muerte o largos períodos en la cárcel para los “malhechores”. La solución está a la vista: cambiar el sistema y la realidad en que vivimos. Creo que es tan o más grave la existencia de programas de televisión que promueven la estupidez y la banalización que el crimen físico en sí mismo.

martes, 24 de marzo de 2009

El Deber del Poeta


¿Los poetas deben sufrir?
¿Deben nutrirse de ironías,
Sembrar palabras de desidia, vicios,
embriagarse en mentiras empalagosas,
crear sortilegios, sutiles ya,
plagados de soberbias metáforas,
de sentimentales metamorfosis,
de inútiles artilugios de la palabra,
de luces de pobre candor poético?

¿Los poetas deben sufrir?
¿Matar con palabras cobardes,
en inmortalidad aparente,
lo que en simples vidas finitas,
no acaban como hombres
con la espada de la vida?

¿Los poetas deben sufrir?
¿O cantarle a la vida,
al pájaro, simple ser de dúctil sonrisa amoratada
al herrero, cristiano por defecto, laborioso por costumbre;
al arroyo cristalino, alma de los campos,
madre del trigo y la cebada;
a los verdes prados, oasis de los templos del cultivo;
a la bondad de los hombres,
a la paz, utopía de los pueblos,
al simple carpintero, siervo de los robles,
hermano de los sauces, de los frescos bosques,
a los niños, hacedores del amor,
de la inocencia y sobriedad;
Cantarle a los madrigales, a las flores, a los ríos,
A la tierra, los frutales.
A la vida misma, a los astros, a los trozos de brillante cuarzo?

¿Los poetas deben sufrir?
¿O cantar a la vida, en simples versos,
cortas prosas,
sutiles frases, y bellas palabras?

lunes, 23 de marzo de 2009

Hagamos Memoria...


Hace 33 años hemos sido destruidos, mancillados, aplastados y denigrados. Hemos sufrido la desesperación, el hambre y la desidia. Hemos visto al pueblo caer y doblarse, llorar y temblar. Hace 33 años el pueblo ha sido salpicado por sangre, veneno, odio, guerra, muerte y locura.
El 24 de marzo de 1976 los militares Jorge Rafael Videla, Emilio Eduardo Massera y Orlando Ramón Agosti encabezaron el último y probablemente el peor y más trágico golpe de estado en la historia argentina. Ese día se inició el llamado “Proceso de Reorganización Nacional”, signado por la desaparición de treinta mil compañeros y la tortura y secuestro a otros tantos. El golpe de estado fue ocasionado por la crisis en la que el país estaba sumido por el pésimo gobierno de la última esposa de Juan D. Perón, María Estela Martínez de Perón, conocida popularmente como “Isabelita”. Además de la “crisis del petróleo”, la extrema violencia interna y actuación de numerosos grupos armados durante el mandato de Isabelita, se le suma el excesivo poder y presupuesto con que contaba el Ejército en esos tiempos y la protesta del pueblo que pedía un cambio de gobierno. Así se inicia un período oscuro en la historia de nuestro país, caracterizado por numerosas violaciones a los derechos humanos tales como secuestros, robos de bebés, torturas extremas, asesinatos, terror de estado y una crisis económica y cultural cuyas consecuencias vivimos aún el día de hoy. El pésimo ejercicio de administración estatal por parte de Isabelita y la Junta Militar generó una crisis económica y social terrible, a lo que se suma una crisis cultural e intelectual que se debió a la represión de la oposición y grupos universitarios. En esos tiempos protestar, pensar, criticar y expresarse en contra del régimen significaba indefectiblemente persecución, lo que significó (sobre todo en la juventud intelectual universitaria) la destrucción de los valores del estudio y la información y un embrutecimiento progresivo de la sociedad.
No es mi intención provocar discordias o discusiones, pero la situación durante el gobierno de Perón y la actual en algunas universidades argentinas no se diferencia mucho de la recién descripta, y se aleja muy poco de las prácticas nazi-fascistas.
El título de esta entrada representa justamente la intención de ejercitar y hacer memoria como método para inmunizar nuestra conciencia social en contra de éstas practicas, aunque el actual gobierno no ayuda mucho en predicar y defender la libertad de expresión y prensa. Si bien muchos sectores y grupos se han encargado de hacer memoria, un sector de la sociedad defiende aún hoy el régimen militar bajo estúpidas y poco profundas frases tales como: “Yo dormía tranquilo”, “No estoy tan seguro de que haya sido así”, “Los militares deberían volver y hacer una limpieza”, “Con los milicos la juventud tenía límites”, “Debería reinstaurarse el servicio militar obligatorio”…y otros tantos comentarios fascistas que no son mas que un caldo de cultivo de dictaduras.
Para recordar tristemente el inicio de la última dictadura militar, la agrupación independiente Utopía para La Liberación (a la cual pertenezco), de la Facultad de Humanidades de la UNNE, organiza el miércoles 25 de marzo una serie de actividades como la proyección de la película “Crónica de una Fuga” y música folclórica y rock en vivo a partir de las 16,00 Hs.

Si un traidor puede más que unos cuantos, que esos cuantos no lo olviden fácilmente
León Gieco

sábado, 21 de marzo de 2009

Marx y Su Concepto del Hombre - Capítulo 2


Capítulo 2: El materialismo histórico de Marx

En la terminología filosófica, el “materialismo” (o “naturalismo”) se refiere a una concepción filosófica que sostiene que la materia en movimiento es el elemento fundamental del universo.
Se entiende, por el contrario, por idealismo (Hegel) una filosofía en la que no es el mundo siempre variable de los sentidos lo que constituye la realidad, sino las esencias incorpóreas o ideas.
Marx, en realidad, adoptó una posición firme contra una forma de materialismo filosófico corriente en su época que sostenía, en su forma más superficial, que los sentimientos y las ideas se explican como resultados de procesos químicos, dejando de lado el proceso histórico y social del hombre.
Marx estaba tan lejos del materialismo recién mencionado como del idealismo de Hegel, por eso podía decir justamente que su filosofía no es ni materialismo ni idealismo sino una síntesis: humanismo y naturalismo. El malentendimiento fundamental en que descansa esta interpretación esta en el supuesto de que el materialismo histórico es una teoría psicológica que se refiere a los impulsos y pasiones del hombre. Pero, en realidad, el materialismo histórico no es en absoluto una teórica psicológica; sostiene que el modo de producción del hombre determina su pensamiento y sus deseos y no que sus principales deseos sean los de obtener la máxima ganancia material. Es cierto que ciertas condiciones económicas, como las del capitalismo, producen como incentivo principal el deseo de dinero y propiedad; otras condiciones económicas pueden producir exactamente los deseos opuestos, como el ascetismo y el desprecio por los bienes terrenales, como sucede en muchas culturas orientales y en las primeras etapas del capitalismo.
La interpretación de la historia no tiene nada que ver con su supuesto impulso “materialista” o “económico”, como el impulso fundamental del hombre. La interpretación marxista de la historia podría llamarse una interpretación antropológica de la historia, si se quisiera evitar las ambigüedades de los términos “materialista” y “económico”; es la comprensión de la historia basada en el hecho de que los hombres son “autores y actores de la historia”
En realidad, Marx NO considera al capitalismo como un resultado de la naturaleza humana ni la motivación del hombre en el capitalismo como la motivación o impulso universal del hombre. En cuanto éste último, Marx estableció una diferencia entre los impulsos “fijos” y “constantes”. Marx suponía que el sexo y el hambre caían en la categoría de los impulsos “fijos”, pero nunca se le ocurrió considerar el impulso por obtener el máximo de ganancias económicas como “constante”. Toda la crítica de Marx al capitalismo es, precisamente, que ha hecho del interés por el dinero y la ganancia material el motivo principal del hombre y su concepción del socialismo es la de una sociedad en la cual este interés material dejaría de ser dominante.
La definición de Marx del trabajo tiene un papel central en su teoría. El trabajo es el factor que constituye la mediación entre el hombre y la naturaleza; el trabajo es el esfuerzo del hombre por regular su metabolismo con la naturaleza. El trabajo es la expresión de la vida humana y a través del trabajo se modifica la relación del hombre con la naturaleza: de ahí que, mediante el trabajo, el hombre se modifique a sí mismo. (Citas textuales de Erich Fromm)

En el capítulo 5, la última idea se profundiza con una descripción detallada y extraordinaria de la concepción de Marx sobre el trabajo enajenado o alienado. En las siguientes entradas, las ideas recién mencionadas se continúan en el contexto del tema tratado.

Marx y Su Concepto del Hombre - Erich Fromm


Este libro del destacado humanista, sociólogo, filósofo y psicólogo social alemán Erich Fromm fue escrito y editado en Nueva York en el año 1961 en su idioma original, cuyo título es "Marx´s Concept of Man". Fue impreso y editado en español recién al año siguiente, en México.
El libro consta de un prefacio y ocho capítulos en los cuales explica las bases filosóficas del marxismo, sin hablar (excepto en algunos párrafos) del marco político – económico de Marx. Es un libro que se ocupa básicamente de la cuestión filosófica del trabajo enajenado (o alienado) y, como el título indica, de la visión marxista del hombre como individuo y como ser social y de la relación de éste con su naturaleza individual y colectiva.
La intención fundamental de este artículo es ofrecer un resumen y comentario de cada capítulo del libro, hecho con frases y oraciones que considero importante y que subrayé en el libro a medida que lo leía, en un intento de rescatar lo fundamental de la obra.
En general, el libro es un instrumento esclarecedor para entender realmente la filosofía de Marx, tergiversada y malinterpretada sobre todo por la visión soviética y por la propaganda capitalista en contra del comunismo marxista.
Quisiera aclarar que las entradas contienen, en su mayoría, citas textuales de la obra de Fromm.
Aquí voy por el primer capítulo:


Marx y su Concepto del Hombre

Capítulo 1: La falsificación de las concepciones de Marx

Entre los malentendidos que circulan no hay quizás otro más difundido que la idea de “materialismo” de Marx. Se supone que Marx creía que la principal motivación psicológica del hombre es su deseo de ganancias y de bienestar económico y que su búsqueda de las utilidades máximas constituye el principal incentivo de su vida personal y de la vida de la especie humana.
La imagen popularizada del “materialismo de Marx – su tendencia antiespiritualista, su deseo de uniformidad y subordinación- es totalmente falsa. El fin de Marx era la emancipación espiritual del hombre, su liberación de las cadenas del determinismo económico, su restitución a su totalidad humana, al encuentro de una unidad y armonía con sus semejantes y con la naturaleza.
La filosofía de Marx tendió a la plena realización del individualismo, el mismo fin que ha guiado al pensamiento occidental desde el Renacimiento y la Reforma hasta el siglo XIX.
Una razón de la errónea interpretación de Marx puede deberse a que los comunistas rusos se apropiaron de la teoría de Marx y trataron de convencer al mundi de que su práctica y su teoría siguen las ideas de aquél. Aunque lo contrario es lo cierto, Occidente aceptó las pretensiones de la propaganda y ha llegado a dar por supuesto que la posición de Marx corresponde a la concepción y práctica rusas. (Citas textuales de Erich Fromm)

Además de las confusiones generadas por la falsa relación de Marx al comunismo soviético, cubano y chino, se le agrega la absoluta ignorancia y desconocimiento por parte de la prensa e historiadores quienes, al parecer, no han tenido el menor interés en rescatar la verdadera esencia del marxismo y profundizar en la cuestión.


En otras entradas continuaré con los demás capítulos del libro.

sábado, 14 de marzo de 2009

Pasión



El nombre del blog lo elaboré en base al título de un libro del filósofo y sociólogo alemán Herbert Marcuse "Razón y Revolución", agregándole la palabra "pasión" como elemento que no puede disociarse, en mi opinión, de los dos mencionados.
Al hablar de la palabra pasión como sentimiento humano fundamental, me refiero a la pasión como sinónimo de entusiasmo, de alegría, de incentivo, de convicción. Hablo de una pasión racional y artística, relacionada a la creatividad y potencialidades del hombre en su naturaleza de individuo y ser social.
Rechazo absolutamente la pasión en tanto fanatismo, sinrazón o dogma. Rechazo la pasión inspirada por creencias imposibles e irracionales. Rechazo la pasión religiosa o teísta en cualquiera de sus manifestaciones. Rechazo la pasión del dogma político y del fetichismo, sea cual fuere su nivel.
Creo firmemente en la pasión intelectual y filosófica, artística y revolucionaria. Creo en la pasión tolerante, abierta y realista. Creo en la pasión desligada de las mentiras religiosas y las fantasías del cielo y la vida eterna. Creo en la pasión científica y empírica. Creo en la Pasión-Razón como término divisible pero absolutamente relacionado. Creo en la pasión del amor por el amor mismo y el amor a la vida. Creo en la pasión altruista, en la pasión del humanista. Creo en la pasión a la naturaleza. Creo en la pasión como pasión y no como fanatismo. Creo en la pasión hedonista. Creo en la pasión racional.

Razón, Pasión y Revolución: Mis intenciones



La creación de este espacio de debate y opinión está motivada por la posibilidad de expresar y discutir pacíficamente acerca de diferentes temas sin olvidar el motivo fundamental del blog, que es la reflexión filosófica, política, social, artística y cultural.
Al ser un absoluto principiante en el manejo de este tipo de espacio virtual, por anticipado pido disculpas si no soy lo suficientemente claro en mis entradas y artículos, ya sea por un mal manejo técnico o por desorden. Con el tiempo iré organizando el blog de manera que sea accesible y sencillo.
En cuanto a los articulos que pienso publicar en el blog, dejaré abierta la posibilidad de emitir opiniones y/o comentarios. Si los mismos son racionales y escritos con buenas intenciones, responderé a todos ellos esté o no de acuerdo con los planteos escritos. Quiero aclarar que borraré inmediatamente cualquier insulto o agravio sin siquiera tomarme la molestia de responder.
Si bien yo soy quien ha creado el blog, voy a contar con la colaboración de una persona a quien aprecio y admiro mucho, quien además cuenta con una formación intelectual, filosófica y de vida realmente envidiable. Tengo que reconocer que seguramente terminará siendo él el alma y pilar intelectual fundamental de este espacio.
Desde ya, agradecería profundamente cualquier comentario o crítica que consideren oportuna. Este espacio aboga por la libertad de expresión y debate, siempre y cuando no caigamos en insultos o agravios innecesarios.
Muchas Gracias.